Más de cinco mil personas acudieron durante el fin de semana a la feria del gallo de pluma y mosca artificial que se celebró en La Vecilla y en la que no hubo animales vivos
Más de cinco mil personas pasaron durante todo el fin de semana por la feria de gallo de pluma y mosca artificial, que este año cumplía su décima edición. La muestra, que estaba instalada en el pabellón polideportivo de La Vecilla, cerró sus puertas ayer.
La muestra, dedicada a la pesca, y que se centra en una especie de gallo única en el mundo, ya que este animal sólo cría en la zona del Curueño, cierra la edición del 2006 con la premisa de intentar conseguir la denominación de origen, o en su defecto la marca de calidad, y que tanto el presidente de la Diputación, Javier García-Prieto, como el delegado territorial de la Junta, Eduardo Fernández, aseguraron que ambas administraciones apoyarán la iniciativa.
Los visitantes no han podido este año contemplar los animales vivos que habitualmente se exponían en los stands, debido a la preocupación de los criadores por posibles contagios de gripe aviaria entre los gallos. En este sentido, también los representantes de la Junta y la Diputación, dejaron patente su preocupación a los criaderos del gallo del Curueño, no sólo por las explotaciones avícolas sino por el valor representativo del gallo de la zona.
Tanto García-Prieto como Fernández tranquilizaron a los criadores por los posibles efectos de la gripe aviaria, aunque los criadores exigen a la Junta las vacunas ya que, de no ser así, «podría llegar a extinguirse esta especie autóctona», declaró el presidente de la asociación de Criadores de Gallo del Curueño, Tomás Gil.
El alcalde de La Vecilla, Francisco Rojo, instó a la unión de todos los criadores de la comarca y «los diez años que contemplan el desarrollo de esta feria y el criterio unificador de todos los que se hacen cargo de su empuje refleja la necesidad de alcanzar la marca de calidad, como paso previo para dar el tirón definitivo para que la iniciativa resulte exitosa del todo».
Los representantes políticos que acudieron a la feria acordaron mantener una línea de colaboración, a disposición de la asociación de criadores a los que se les conseguirá toda la ayuda técnica que se precise para que las medidas que se tomen tengan en cuenta la singularidad de estos gallos y que la situación actual se pueda reconducir en escenarios favorables para preservar la especie del Curueño.